MALENA

MALENA
No te subas al auto que ya volvemos, Malena. Ya volvemos, en serio, y te vamos a dejar entrar a la casa. Sabes que tu sabana esta adentro, le dije al irme.
La noche, como sabiendo el desenlace, lloraba en grises garuas. Yo no me di cuenta. Un algo me decía que no vaya, que no iba a perder nada si faltaba a la reunión, igual fui.
Vuelta rápida al hogar para no dejar entrar el frio. Abro el portón de hierro bien cerrado, mas para que no salga Malena que para evitar que entren los Cacos.
Bajo del auto, el silbido de siempre…Malena no viene. La llamo por su nombre…ella no aparece. Pensando que la lluvia fría la había acobachado en su casita, salgo a buscarla, llego, me agacho, la oscuridad no me deja ver nada. Saco el celular para buscar una silueta, ella no esta.
Desesperado busco tras las plantas, en la calle, le grito, le silbo, no obtengo nada. Vuelvo desde la calle, costeando la casa por el patio. Me suena el celular, atiendo, es mi esposa, la madre. Llego al vértice del costado de nuestra casa, a la pared trasera donde esta nuestra ventana, miro a la derecha sobre el piso-que pasa mi amor- escucho del otro lado del teléfono, y sin tragar el nudo mi garganta escupe Malena esta muerta. Esta electrocutada.

MALENA 2
Te agradezco:
tus voces en ladridos;
Tus búsquedas de cariño;
Tu hocico en mi mano, en mi cara.
Te agradezco:
Tu compañía silenciosa en mis noches laborales;
Tu ausencia de aullidos ante mis cantadas;
Tus avisos matinales, jugabas a ser gayo.
Te agradezco:
Tu cara tierna, cuando me sentía feliz.
Tu cara tierna cuando me sentina triste.
Tu cara tierna, cuando me sentía dichoso.
Tu cara tierna, cuando me sentía una mierda.
Te agradezco sencillamente por haber sido mía
Aunque, ahora que lo pienso bien
Yo era tuyo, ante tu mirada amarrilla.